El aeropuerto de Barcelona, «El Prat»

El maravilloso e imponente aeropuerto de Barcelona «El Prat».

Llegar al nuevo aeropuerto de Barcelona deja a más de un turista boquiabierto: esta enorme construcción de cristal pulido y diseño moderno impresiona y acoge a su invitado con elegancia y maestría.

Conocido popularmente con el apelativo Aeropuerto del Prat, su nombre oficial actual es el de Aeropuerto de Barcelona El Prat. Segundo aeropuerto más grande de España, y primero en la comunidad de Cataluña y la costa mediterránea, este lugar de paso fue honorado como el segundo mejor aeropuerto del Sur de Europa en los World Airport Awards 2015, premio otorgado por la consultora inglesa Skytrax.

Compuesto por dos grandes terminales, la T1 y la T2 (reúne las antiguas terminales A, B y C), y con 3 zonas de aterrizaje y despegue, el aeropuerto de Barcelona ha logrado convertirse en un aeropuerto internacional, décimo en el tráfico de pasajeros de Europa.

Pero este aeropuerto es más que un mero lugar de acogida y salida: se ha transformado en un auténtico centro comercial. El aeropuerto de Barcelona mima y cuida a su pasajero: le ofrece una amplia gama de tiendas de moda, gafas y accesorios, posee farmacias, comercios de lencería y tiendas de decoración, cobija un gran número de restaurantes y bares con tapas mediterráneas, pizzas italianas, sushi japonés o incluso comida rápida americana. Presta suma atención en el higiene y cuidado de los servicios públicos, mantiene en perfecto estado sus zonas comunes: en suma, vive por y para garantizar el mayor bienestar a su cliente.

En los próximos años, el aeropuerto tiene previsto sofisticar su oferta de producto y acoger entre sus paredes a las más reconocidas firmas de lujo. Además, el recinto posee 5 salas Vip, ideales para quienes desean esperar el vuelo de forma agradable y tranquila.

Aún así, el aeropuerto de Barcelona destaca por ser un aeropuerto silencioso. Esto se debe a que ha reducido en gran medida la transmisión de mensajes por megafonía, y en su lugar ha incorporado más monitores de información de vuelo en la zona de restauración, quienes indican con tiempo la puerta de embarque de cada compañía y vuelo. Este ambiente silencioso y calmado queda impregnado en sus pasajeros, quienes sintonizan con esta tranquilidad y quietud, y deambulan o esperan con solemnidad la llegada o salida de un vuelo.

Además, el aeropuerto El Prat está conectado con la línea de tren y de metro de Barcelona. A esto se le suma un servicio constante de buses de corto y largo recorrido y taxis circulando permanentemente.

Ya no tienes excusa para no venir a Sitges, puesto que el recinto de acogida es, cuanto menos, excepcional. Si alquilas un chalet de WeeklyVillas durante tus vacaciones en Sitges, puedes contratar el servicio premium de recogida en el aeropuerto por un chófer privado, quién te conducirá en tan sólo 15 minutos hasta la entrada de tu villa privada.